A mediados de Noviembre mi marido hizo el gran descubrimiento. Le habían contado uno de sus proveedores habituales que tenía un herbicida selectivo que mataba la invasión de gramones que teníamos. Según ellos era fantástico. Muy ilusionado llegó a casa y me lo enseñó:
- Mira el dibujo! son los mismos gramones que tenemos.
-Ya pero aquí pone gramíneas y gramínea es toda la hierba que tenemos.
- Bueno pero en el dibujo son las mismas que quiero quitar yo.
Después de 45 años de matrimonio y casi 5 de noviazgo, ya tienes suficiente experiencia como para no insistir. Si insistes y no lo echa, estarás aguantando el tema cada vez que salga al jardín así es que ánimo y a esperar.
Todos los días salía al jardín miraba los gramones y juraba en hebreo por las mentiras que te venden y lo caro que había sido para nada. Yo veía que todo el prao cambiaba de color pero no decía nada. Pasaban los días y él decía que había un mes de plazo para que los gramones se murieran. Era tan evidente que se estaba muriendo todo que yo no entendía cómo no lo notaba. Yo pensaba calladita estás mejor.
Y ocurrió lo que yo me esperaba. Yo avisé a la familia. Les dije el césped ha muerto pero cuando vengáis en Navidad haced como si el césped sigue existiendo. Ningún comentario con el tema porque con toda la obsesión que tiene vuestro padre y abuelo con esto, lo único que falta es que metáis el dedo en la llaga. Eso si, por whasapp nos hemos echado unas risas sin que él lo supiera.
10 de Diciembre
El 10 de Diciembre comienza la operación, escarificado y recogida de todo lo seco, paso del rodillo, siembra de césped, cubrirlo de tierra y vuelta a pasar el rodillo. La inmensa suerte de un tiempo favorable, para nada invernal y de contar con la lluvia precisa los días siguientes. Aún así yo pensaba, con lo que nos costó tener el prao que teníamos, que no era césped porque habíamos sembrado tantas veces, tantas semillas diferentes que se había convertido en un prao desde el principio.
9 de Enero
A los 10 días comenzó a nacer la hierba. Para Navidad ya verdeaba el prao. Hasta el punto de que la familia que vino esos días se quedaron ojipláticos. Para Nochevieja vinieron mis hijos y nietos, advertidos por mi de que no encontrarían césped y se quedaron igual que los de Nochebuena. En realidad todos nos sorprendimos de que algo que hace 15 años nos llevó un año para quedarnos siempre mal, en apenas un mes, desde que se echó el herbicida hasta que salió la hierba, nos permitiera tener un césped como no lo habíamos tenido nunca.
Yo estaba convencida de que si el herbicida había sido tan efectivo como para cargarse toda la hierba, se cargaría también la que naciera de las semillas, si es que llegaba a nacer. Había leído muchas veces que después del herbicida había que dejar meses en reposo para que se fuera yendo el herbicida del suelo.
20 de Enero hace dos días que se le ha dado la primera siega. Se ha dejado alto. Y a continuación se ha abonado. Hoy el color ha cambiado con el abono. Es más oscuro el verde.
Lo que no ha cambiado desde que echó el herbicida es que mi marido sale todos los días a mirarlo. Antes volvía a entrar en casa con cara de kbreo ahora entra con una cara de satisfación increible.
Moraleja: No hay mal que por bien no venga
Las semillas eran Raygras
Saludos.